¡Qué feo es esto!

Tenía pensado un día tranquilo mientras la familia desayunaba, haciendo poca cosa, solo Tudons, y volviendo pronto a casa, pero no haber hecho La Carrasqueta el día anterior me obliga a tardar un poquito más. Bueno, casi toda la mañana.

En Orxeta comienzo la subida a este puerto de la Sierra de Aitana. El paisaje de Tudons, salvo en el tramo final, es descorazonador. La subida no tiene especial dureza en ninguna parte y se hace muy bien a ritmo, por buena carretera.









Al pasar Sella la cosa cambia bastante. Se mantiene una subida suave pero por un entorno mucho más agradable. La roca deja paso a un terreno arbolado que se hace mucho más ameno. Me entretengo esquivando conos que han colocado los de mantemiento de carreteras, ya que le están pintando las líneas.







Otro ciclista y yo hacemos cumbre al mismo tiempo. Él viene de la otra vertiente y le pregunto si se puede subir a Aitana, pero no, una valla impide el paso a la base militar. Charlamos durante bastante tiempo sobre algún que otro puerto de la zona y me dirijo a Jijona para subir La Carrasqueta.

El entorno de Jijona es de lo más feo que recuerdo en todo el territorio ibérico. Salgo de la casa de los turrones El Lobo y me incorporo a la carretera que lleva a Alcoy.







Tres o cuatro curvas de herradura completan la subida, ya que solo hay unas cuantas rectas muy suaves.



Sin perder demasiado tiempo en su cima, me voy para casa. Para terreno desértico prefiero el original, prefiero el almeriense. Esto me parece feo de cojones.

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