Después de haber terminado con éxito el Medio Maratón Villa de Madrid, el objetivo perseguido durante un par de años de duro entrenamiento, Amaia tiene que marcarse algún nuevo reto. Aunque hay varias cosas por ahí, sobre todo con el agua de por medio, las carreras de montaña pueden ser muy interesantes.
Y para empezar a probar, nos vamos a correr por el parque de Ollargan, para probar alguna buena cuesta por las faldas del Malmasín. No se trata de llegar hasta arriba, sino de ir preparando las piernas para los altos porcentajes y, sobre todo, para un piso más irregular que el asfalto habitual.
Como no vamos a hacer mucho, Ander nos acompaña con la bicicleta. Completamos ocho kilómetros y medio entre ir y volver a casa. La prueba es todo un éxito y parece que hay posibilidades de ir avanzando en esta otra disciplina de la carrera a pie que a mí tanto me gusta.
Y a cambio, yo también me pongo una gran meta: echarme al agua. Para alguien que nada como yo, que solamente avanza en el agua para salir de ella, va a ser todo un reto, mucho más exigente que cualquier otra cosa que haya hecho antes. Y ya sé cuál será mi meta: el EXTREME-MAN de Salou, un equivalente al IRON-MAN hawaiano pero con un viaje asequible. Me doy de plazo hasta la edición de 2013 para preparar la posta de natación, porque la de ciclismo y la de carrera no me haría falta tanto tiempo.
¡Esta sí que va a ser buena!
2 Comentarios
dice mi mujer, que que hizo amaia para quedar asi? Que tipazo.
ResponderEliminar+50km de carrera a la semana, +/- una hora caminar diario, una media hora de ejercicios al día (pesas, gomas, ...), alimentación muy cuidada, buen humor, ...
ResponderEliminarVamos, que se lo está currando a base de bien.
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