Sin ayudas externas

Hoy toca día de playa y nos vamos a Plentzia. Nada más llegar, notamos una gran diferencia con la playa de Ereaga: el agua está superlimpia. Hace calor y no me apetece mucho ir con el neopreno en el kayak así que, como hemos leído que el agua está a 22ºC, decido nadar sin él. Al principio me acojona un poco pero luego veo a más de uno nadando a pelo y me tranquiliza mucho.



Como de costumbre, nadamos por turnos. Mientras uno le da al tema, el otro le sigue en el kayak para poder ir midiendo la distancia con el GPS. En Getxo ya tenemos más o menos cogidas las distancias pero aquí, como es la primera vez, andamos un poco despistados.

Como esta playa está petada, decido bajar el kayak por unas escaleras de la ría y recoger a Amaia en la playa, salvando así la zona del gentío. Me cuesta llegar a la bocana de la ría porque hay un viento muy molesto de cara.

Empieza la parte de natación y seguimos las boyas que delimitan el área de baño. Nos salen casi mil metros hasta la playa de Gorliz, con viento en contra y la corriente también. De vuelta será más fácil y el agua, para mi gusto, a una temperatura perfecta. No he necesitado ayudas externas, léase neopreno, ni para el frío y para flotar. La sesión de tres mil en piscina de anteayer me ha venido de maravilla.

Nunca me ha gustado la playa pero le estoy cogiendo el punto. Tal vez porque vamos, hacemos la sesión que tengamos planificada y nos piramos. Eso de tirarse en la toalla a freirse como croquetas parece que no es lo nuestro.

Safe Creative #1007090003507

0 Comentarios