Las sesiones típicas de carrera por asfalto suelen ser de diez kilómetros pero hoy, tras el duro acuatlón de ayer, nos ponemos como objetivo una salida algo más larga, de quince kilómetros.
Salimos por el recinto festivo y no resulta tan incómodo como otros años. Parece que haya menos txoznas o que estén más repartidas porque el Arenal está algo más despejado y se puede pasar bien.
Hacía tiempo que no corría hasta los confines del paseo de Olabeaga. Nos damos media vuelta en las naves de Zorroza para estirar la distancia. A pesar de haber tenido ayer una jornada muy exigente, parece que llevamos un ritmo muy bueno y que la conversación es bastante fluida. Así da gusto salir a correr.
Completamos los quince kilómetros muy bien, sin molestias, sin cansancio, sin haber sufrido nada. Y lo mejor de todo ... que se ha pasado muy rápido. Aún recuerdo lo aburridas que se me hacían estas salidas y lo poco que me cuestan ahora. Hasta se me hacen entretenidas.
1 Comentarios
Quien te a visto y quien te ve...sirenita!!!!!!....
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