Segura y mojada

En todo lo que va de mes, aún no he dado una pedalada. Y si quito la salida con BTT a La Fuenfría y un par de salidas anteriores con alforjas, no he rodado con ruedas finas desde la Bilbao-Bilbao. De eso hace más de un mes, así que no sé cómo me encontraré. Como hoy es la Erandio-Erandio, una marcha cicloturista conocida como La Segura, decido seguir su trazado y verla de espectador.

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Salgo a las 09:00 de casa, la misma hora a la que la marcha sale de Erandio. Con un poco de suerte, como la salida la hacen neutralizada, me toparé con el grupo por Larrabetzu. No llueve de salida pero me temo que voy a chupar agua toda la mañana.

A nada de empezar a subir el alto de Morga, la cabeza de la marcha llega a mí. Me pasan una moto, un coche, un montón de ciclistas, ...

El primer grupo ni lo veo y empiezo a mezclarme con descolgados. Por detrás viene alguna grupeta más pero ya hay gente que tiene pinta de comerse la marcha en solitario.

Pensaba que iban a ascender completamente Aretxabalagane pero en Astoreka toman el desvío que desciende hacia Gamiz. Empieza a llover y ya no va a parar en toda la mañana. Como voy bastante a mi bola, ni me molesto en intentar seguir la rueda de ningún pelotón.

Giramos hacia Olabarri como para subir a Gerekiz pero tomamos el desvío previo que se dirige a Errigoiti. Es una subida muy suave, al igual que todas las que tienen en este recorrido.

Voy enlazando con alguna pequeña grupeta, pero sin ser gran cosa. Como mucho, un puñado de ciclistas que transitan juntos. No sé qué participación ha tenido la marcha pero tampoco parece gran cosa.

Hay gente que ya lleva un ritmo muy lento y no llevamos mucho más de treinta kilómetros aunque, por detrás, va llegando algún grupo más numeroso.

Corono Errigoiti y ya llueve con más intensidad. Aún así, todavía no me pongo el chubasquero que llevo en un bolsillo. El descenso a Gernika lo hacemos muy lento porque la carretera está algo peligrosilla.

Volvemos hacia Mungialdea por Gerekiz. Tampoco es que se hayan estrujado mucho la cabeza para diseñar el recorrido. La vez que participé oficialmente en una Erandio-Erandio fue mucho más atractivo, con un bonito periplo por la costa vizcaína que culminaba en la ascensión a Sollube. Esta otra vuelta me parece muy light.

No me encontraba demasiado bien pero Gerekiz lo subo a bastante mejor ritmo que Errigoiti. Igual es que, como los grupos cabeceros ya han pasado, me comparo con gente que va más suave y, aunque solo sea por eso, me da la impresión de que vaya mejor. En el descenso de Gerekiz tienen situado el avituallamiento. Tal vez un poco tarde puesto que es casi el kilómetro setenta de una marcha que tiene noventa y pocos.

Paso por el avituallamiento y, como la gente para en él, sigo solo camino de Mungia. Me tengo que detener para ponerme el chubasquero porque se pone a llover con más fuerza.

Camino de Unbe, hay un buen terreno llano por Gatika en el que me pasan varios pelotones. A más de uno le hago la puñeta puesto que, como no tengo intención de seguir ruedas, alguno se queda cortado siguiendo la mía.

A Urduliz llego bastante cascado y subo Unbe a un ritmo muy bajo para lo que suele ser habitual. No para de llover y, tras descender, me separo de la ruta de la marcha en la rotnnda de Asúa. Iniciando la subida a Enekuri, un tipo que va a mi rueda me pregunta si soy de la marcha. Mi respuesta le obliga a dar media vuelta y a tomar el camino correcto. Mientras tanto, yo termino la ruta con algo menos de cien kilómetros pero con bastante cansancio. Se nota que hace tiempo que no cojo la bicicleta de carretera.