Ya va siendo un clásico la salida trotera recuperadora. Con esa idea, hoy toca salir a patear el asfalto por los lugares habituales. Como es día festivo en Bilbao y no hay nada que hacer al terminar, no nos damos excesiva prisa por salir de casa.
El inicio no es muy duro. A pesar de haber tenido buena pechada en el día de ayer, las piernas responden perfectamente desde los primeros pasos. Hace calor y mi poco peso hace que empiece a adaptarme mejor a esta temperatura que al frío.
Pero a partir de la mitad del recorrido se me empieza a hacer un poco largo. Solo vamos a hacer diez kilómetros y, a diferencia de lo que suele ser habitual, estoy yendo de más a menos. Se confirma que la salida de ayer fue más dura de lo que parece.
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