Un domingo cualquiera

Llevo dos semanas y media sin ir a nadar pero, a partir de ahora, puede que me acostumbre a ir a la piscina una vez por semana, dependiendo del tiempo que nos haga en invierno. Hay que aprovechar los fines de semana para hacer rutas largas y el día que sobra me iré al agua.



La idea de hoy es la de soltar un poco piernas, que ya empiezan a sentirse un poco pesadas, y nos proponemos hacer un dos mil porque menos ya es poca cosa y casi no merece la pena el paseo hasta La Alhóndiga para hacer menos.

A diferencia de otros días, esta vez soy yo el que marca el paso para que Amaia no termine doblándome un montón de veces y así poder terminar los dos algo más parejos. He mejorado mucho en esta disciplina pero su ritmo me sigue resultando inalcanzable.

- 40 x 1 (50 m). crol.
Total: 2.000 metros

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