El condado de Perth

Los días son tan largos que dan para más de lo que tenía planificado. Sigo mi viaje hacia el sur de Escocia y me detengo en Milton, en pleno Perthshire. Glen Quaich es el objetivo de esta zona y diseño una circular corta que me permita subirlo por su vertiente más dura, la de Kenmore.

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El condado de Perth Milton 45 km 750 m+ IR

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Dejo el coche en una especie de aparcamiento que hay enfrente de una casona, junto a una rotonda en la que sale una carretera que forma parte de la ruta turística de Perthshire.


El tramo de Milton a Aberfeldy me lleva hasta el bosque de Griffin. Es una subida muy suave de unos ocho kilómetros, con una media de un 2% que no resulta ser ningún problema.


Llego al altiplano en el que se encuentra el desvío para acceder a la zona recreativa del bosque y me recibe el Loch na Creige, un pequeño lago que bordea toda la carretera.


El bosque de Griffin se hace más denso durante el kilómetro llano que hay antes de descender hacia Aberfeldy de manera más intensa.


En el descenso paso por un par de serrerías y me cruzo con los primeros coches de este sector. Vuelvo a tener calorcito y eso se agradece.


Aberfeldy ya queda atrás y entro en una carretera algo más transitada. El paisaje es muy cambiante y lo mismo paso por un bosque, que hay grandes praderas o que asoman las montañas.


Llego a Kenmore, una localidad muy chula a orillas del lago Tay que me recuerda a los grandes lagos del norte de Italia. Aquí está el comienzo de la dura subida a Glen Quaich.


Una pista asfaltada sale con una pendiente de golpe que asusta. Veo bajar a un todoterreno y me preparo para lo que viene, sacando una foto antes de empezar a dar pedales.


Son tres kilómetros casi al 10% hasta empezar a respirar de nuevo. La parte más dura se encuentra al principio, donde la media del kilómetro se sitúa en el 13%.


Ha sido un buen calentón hasta llegar a una barrera canadiense. La pendiente afloja mucho en la parte alta, quedando dos kilómetros finales a un suave 3%.


En esta parte final se pueden hacer todas las fotos que la pendiente del inicio no permitía. Se llega a una zona de praderas y lomas donde el aire pega con fuerza.


Es difícil establecer dónde se encuentra la cota más elevada en este sube y baja final. En la parte alta también hay un pequeño lago, aunque más bien parece una charca grande.


Sigo el camino y me voy encontrando con algún que otro rebaño de ovejas. Me llama mucho la atención que haya neumáticos con la advertencia 'slow down lambs' para que baje despacio.


La primera parte de la bajada es tan suave como la parte final de subida, alternando algún que otro tímido repecho. El lago Freuchie se ve perfectamente desde este punto.


Está siendo un sector precioso, una muestra perfecta del paisaje interior de Escocia. La carretera estrecha está en perfectas condiciones y el aire se une a la pendiente para que casi no tenga que dar pedales hasta llegar al coche.


Siempre es un placer rodar junto al agua. Ya me encuentro en los diez últimos kilómetros y me empieza a dar pena abandonar un terreno tan apetecible para la bicicleta.


El lago Freuchie queda atrás y me dirijo hacia la carretera de Crief. Solo me quedarán dos kilómetros en cuanto entre en ella y, con el viento favorable, cada vez más intenso, son solo unos pocos minutos antes de estar en el coche.


Llego a Milton y todavía me queda mucho día por delante, el suficiente como para seguir avanzando. Solo que ya no me apetece andar más en bici y decido cambiarme. Llevo esta subida de adelanto sobre los planes iniciales y es una buena oportunidad para detenerme en Edimburgo por más tiempo del que tenía pensado.

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