Estoy empeñado en perder los tres kilos que me he cogido en las fiestas y correr es la mejor forma de hacerlo, así que sigo con esta rutina. Como esta mañana no he podido salir, lo hago por la noche, al salir de clase.
Me pongo en marcha a eso de las ocho y cuarto. Está lloviendo pero no me importa porque llevo la chaqueta de Goretex. También hace frío pero no me afecta lo más mínimo. Es increíble la de gente que corre a todas horas, haga frío o calor. Lloviendo a mares y somos una manada. Al final, me salen ocho kilómetros, suficiente para la hora que es y para no haber comido nada desde la una del mediodía.
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